Se trata de una viñeta del humorista gráfico español El Roto.
La intención del autor es darnos a conocer la realidad a través de un humor negro, que nos invita a reflexionar.
La imagen nos muestra a un cazador que ha disparado a un ciervo. El hombre dice que se puede matar a los animales porque no tienen alma, pero eso no puede ser más incierto. Por supuesto que los animales tienen alma, como los seres humanos, tienen sentimientos y sufren. El ciervo contesta diciéndole que son los humanos que se dedican a matarlos los que no tienen alma. Estoy de acuerdo con el animal porque yo no sé como alguien puede vivir con la conciencia tranquila tras haber matado a un animal.
Pienso que se deberían hacer unos "derechos animales", al igual que los derechos humanos, porque ellos también merecen ser respetados y vivir su vida. Merecen tener una vivienda digna y no ser abandonados. Por desgracia, cada día crece el número de mascotas abandonadas en las calles porque sus dueños ya no las quieren. Sobre todo, nos encontramos con galgos que han dejado de servir a sus dueños tras la temporada de caza. Algunos incluso los ahorcan ellos mismos, los lanzan a pozos profundos o los matan de desnutrición. También están las personas que maltratan a sus animales y les hacen toda clase de maldades y todo ello, ¿por qué? pues no lo sé.
Pienso que se deberían endurecer las leyes con respecto al maltrato animal.
En la actualidad, hay gran cantidad de refugios para perros y gatos abandonados que no cuentan con ninguna ayuda por parte del Estado para hacerse cargo de los enormes gastos para la comida, el veterinario, las medicaciones. Porque la mayoría de los animales llegan a estos lugares con problemas físicos y necesitan seguir una medicación o ser operados. Los problemas no son solo físicos sino también psíquicos, ya que algunos tienen miedo de los humanos y cuando alguno se acerca a acariciarlos se apartan. Menos mal que hay gente que está concienciada y aporta su ayuda.
Yo personalmente conozco en profundidad este tema y por ello quiero hacerme eco de dos noticias actuales:
En Sevilla, hay un refugio para perros y gatos que cada día recibe a más animales por lo que quieren ampliar el espacio del que disponen, pero le han negado el permiso para llevar a cabo la obra. Además, deben una gran cantidad de dinero a los veterinarios, por lo que necesitan de almas caritativas que aporten su granito de arena.
En Barcelona, han prohibido que los animales participen en los circos.
Muchos circos utilizan animales salvajes en cautividad para sus actuaciones y por ello su comportamiento está lleno de características como automutilaciones, golpearse la cabeza o morder los barrotes de las jaulas. Cuando no hay representación, los animales pasan la mayor parte de su vida atados o encerrados en jaulas, en las que apenas tienen capacidad de movimiento y en las que han de comer y hacer sus necesidades, además de viajar en camiones, con condiciones climatológicas extremas. En el entrenamiento, los animales sufren el maltrato como la extirpación de garras en los felinos para evitar accidentes, la extirpación de dientes incisivos en los chimpancés y la utilización de varas, palos y látigos. Todo esto se puede apreciar muy bien en la película Agua para elefantes.
Yo me pregunto, ¿por qué les hacen todas esas cosas? ¿Tratarían igual a un ser humano? Seguro que no, porque las personas que hacen esto consideran a los animales como seres inferiores que solo existen para el entretenimiento y para la caza.
En conclusión, seamos conscientes de que los animales sienten cariño por sus amos y le son fieles y que no pueden entender por qué les hacer sufrir.
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